La cortina de cristal es un sistema de acristalamiento vertical transparente y muy ligero a la vista, prácticamente imperceptible. Al no llevar perfilería vertical, su belleza estética radica en su indiscutible transparencia.
Su desplazamiento natural es el de corredera, pero al llegar a uno de los extremos, las distintas hojas de cristal templado de 10 milímetros de espesor se pliegan como un acordeón. Es decir, las hojas se giran de forma batiente y se apilan unas contra otras, reduciendo todo el cerramiento a la mínima expresión.
La principal ventaja de la cortina de cristal, además del aislamiento acústico y térmico, es que no produce ningún impacto visual negativo, manteniendo prácticamente intactas las vistas. Por otro lado, transforma la terraza en una zona abierta o cerrada en un segundo y sin esfuerzo.
Si bien hay que decir que el nivel de aislamiento, aun siendo muy bueno, no llega al nivel de otro tipo de cierres más convencionales, pero estos más aparatosos y mucho menos económicos.
Aspectos técnicos
Las distintas hojas de vidrio que componen la cortina de cristal de forma independiente están colgadas de los rodamientos superiores y se deslizan por el carril inferior. Dicho deslizamiento puede ser en ambos sentidos y, al llegar a cualquiera de sus dos extremos, se pueden abrir de forma batiente. Los rodillos de deslizamiento son de alta resistencia, y soportan fenómenos atmosféricos, resisten al rozamiento y son muy silenciosos.
Asimismo, en el perfil inferior se puede instalar varias versiones, desde perfiles para nivelar o embutidos en el piso para dejar pasar a los usuarios sin crear escalones indeseados. El del perfil superior es el que nivela las hojas de vidrio con sus compensadores, estando diseñado para hacer frente de forma óptima al peso total de la cortina de cristal. La conexión a la pared se realiza mediante juntas flexibles de goma que garantizan la estanqueidad.
Este sistema permite el deslizamiento de las hojas de cristal incluso en ángulos de 90º y curvos, lo cual posibilita la realización de instalaciones poligonales, redondas e incluso con las geometrías más complicadas. El inconveniente de las cortinas de cristal es la limitación de tres metros de altura, cubriendo prácticamente todas las necesidades de cara a viviendas, zonas residenciales, hostelería, etc.
Este tipo de cierres están diseñados para que las manipulaciones erróneas no supongan un riesgo para el usuario, ni para ningún transeúnte que pudiese pasar en este momento.
El tipo de vidrio utilizado en estos cierres es cristal templado de seguridad de 10 milímetros de espesor. El comportamiento de este tipo de cristal frente a golpes es similar al de los parabrisas de los coches. Se desintegra en pequeños trozos los cuales no producen cortes. Además, el tratamiento que recibe el cristal templado en su fabricación hace que su resistencia propia del vidrio normal se multiplique por tres frente a impactos.
Ventajas de la cortina de cristal
Las cortinas de cristal tienen múltiples ventajas. A continuación, en Acristalar te contamos cuáles son:
- Se integran a la perfección al no romper la estética de la edificación.
- Supone una protección contra inclemencias meteorológicas
- Son económicas, estando al alcance de cualquier negocio.
- Tiene una instalación rápida, sin necesidad de reformas costosas.
- Es de fácil manejo y limpieza.
- Tienen una apertura fácil mediante un pomo con pulsador o con cerradura con llave.
- Se emplean materiales de máxima calidad y alta resistencia al desgaste
- Son adaptables a cualquier necesidad de instalación, forma o diseño.
- Admite desniveles gracias a sus perfiles de compensación si fuesen necesarios.
- Permite disfrutar de espacios desaprovechados.
- Alarga la vida del espacio protegiendo sus estructuras y elementos.
- Reduce el mantenimiento de las terrazas.
Características de la cortina de cristal
Los perfiles están disponibles en una amplia gama de colores, adaptados a sus necesidades. Además, es rápido y fácil de instalar, sin grandes obras y de una forma limpia.
Las cortinas de cristal ofrecen una máxima seguridad, debido en gran parte al innovador sistema de fijación que incorpora, vidrios templados atornillados al perfil para evitar despegues y roturas. También, reducen los niveles de ruido en hasta un 60%.
Este tipo de cerramiento puede adaptarse a la mayoría de hogares con terrazas, balcones o patios. No importa si son grandes, rectangulares, circulares o de cualquier tipo de formato.
La perfilería está disponible en aluminio anodizado, gama Ral, gama Future, lacados en madera, lisos y texturados. Las cortinas tienen una altura máxima de instalación de 3 metros y un ancho de hojas desde 50 a 80 centímetros.
En Acristalar diseñamos compartimentación interior y exterior tanto para particulares como para negocios. Solicita más información sin compromiso y te asesoraremos.
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