El calor del verano puede convertir cualquier estancia acristalada en un auténtico invernadero si no se toman las decisiones adecuadas. La buena noticia es que hoy existen soluciones técnicas que permiten disfrutar de espacios luminosos sin renunciar al confort térmico. Una de las más efectivas es el acristalamiento con control solar, un sistema diseñado para reducir la ganancia térmica sin necesidad de recurrir al aire acondicionado.
En este artículo te contamos cómo funciona, qué tipos existen y por qué puede ser la clave para tener una casa fresca, eficiente y cómoda incluso en los meses más calurosos.
¿Qué es el acristalamiento con control solar?
El acristalamiento con control solar es un tipo de vidrio diseñado para bloquear parte de la radiación solar, especialmente la infrarroja, responsable del aumento de temperatura en el interior de los espacios. A diferencia del vidrio común, este cristal permite el paso de la luz natural pero reduce significativamente el calor que entra desde el exterior.
Este tipo de acristalamiento está formado por una o varias láminas de vidrio tratadas con una capa selectiva, metálica o de óxidos especiales, que reflejan o absorben parte del espectro solar. Además, cuando se combinan con doble acristalamiento y cámaras de aire o gas argón, la eficiencia térmica se multiplica.
Beneficios de instalar control solar en tu cerramiento
Instalar vidrio con control solar en cerramientos, terrazas, techos móviles o cortinas de cristal tiene múltiples ventajas:
1. Menor temperatura interior en verano
Reduce la entrada de calor entre un 30 % y un 60 %, dependiendo del tipo de vidrio y la orientación. Esto se traduce en una sensación térmica más fresca sin necesidad de climatización activa.
2. Ahorro energético
Al evitar que el calor entre, el uso de ventiladores y aires acondicionados disminuye. Esto reduce el consumo eléctrico y, por tanto, la factura mensual.
3. Mayor confort sin perder luz natural
A diferencia de persianas o cortinas opacas, el acristalamiento con control solar mantiene la transparencia y la luminosidad, creando ambientes agradables para leer, descansar o trabajar.
4. Protección contra rayos UV
La mayoría de estos vidrios bloquean hasta el 99 % de los rayos ultravioleta, protegiendo muebles, suelos y tejidos de la decoloración y el deterioro.
5. Valor añadido a la vivienda
Un cerramiento acristalado con control solar no solo mejora la habitabilidad del hogar, sino que también aumenta su valor estético y funcional, ideal para quien busca vender o alquilar.
¿Dónde se recomienda usar este tipo de vidrio?
El acristalamiento con control solar es especialmente útil en:
- Terrazas orientadas al sur o suroeste
- Porches o balcones cerrados
- Espacios con techos acristalados
- Salas con grandes ventanales o cortinas de cristal
También es recomendable en zonas donde las temperaturas superan habitualmente los 30 °C en verano, o en viviendas donde se quiere minimizar el uso de climatización artificial.
¿Qué tipo de cristal elegir?
Existen varios tipos de vidrio con control solar:
- Vidrio de capa selectiva: con tratamiento metálico para reflejar radiación solar.
- Vidrio tintado: reduce el deslumbramiento y la entrada de calor.
- Vidrio reflectante: útil en climas cálidos con mucha exposición directa.
- Vidrio bajo emisivo + control solar: ideal para quienes buscan rendimiento todo el año.
La elección dependerá de varios factores: orientación, tamaño del cerramiento, uso del espacio y preferencias estéticas.
Disfrutar del sol y de un espacio luminoso no tiene por qué significar pasar calor. Con un buen acristalamiento con control solar, puedes combatir las altas temperaturas sin aire acondicionado, ahorrar energía y aumentar el confort en tu hogar.
Si estás pensando en acristalar una terraza o mejorar un cerramiento existente, consúltanos en Acristalar. Te ayudamos a elegir la mejor solución para que este verano lo disfrutes más fresco, más cómodo y con más luz que nunca.